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19 febrero 2025

Uso de cenizas al inicio de la Cuaresma

Cenizas en Cuaresma


La Cuaresma inicia con el Miércoles de Ceniza, y es una preparación para la Pascua del Señor. Cuaresma y Pascua son un binomio inseparable; sin la Pascua la Cuaresma no tiene sentido. Y la  Cuaresma, en cuanto preparación, se realiza mediante el camino que propone la Iglesia: el de la conversión y la penitencia.

La Iglesia nos recuerda que Cuaresma y liturgia están estrechamente unidas. Es cierto que hay actos de piedad, como el viacrucis, que no son propiamente liturgia; y que son valiosos en el camino cuaresmal. Pero no cabe dudas de que la Cuaresma se viva principalmente en la Liturgia, sobre todo en la eucaristía y en el sacramento de la confesión. También la oración y la Biblia se convierten en elementos esenciales en el camino de la conversión y la penitencia.

"Tiempo de conversión", sí. ¡Eso es la Cuaresma! Tiempo de conversión y penitencia. Son palabras casi pasadas de moda. Y han llegado a ser malas palabras en muchos ambientes, incluso católicos. No es fácil seguir a un Jesús que va al desierto para dedicarse a la oración y la penitencia (por medio del ayuno). En el desierto Jesús se centra solo en la voluntad de Dios, su Padre; y solo se alimente de la Biblia. Por eso termina venciendo las tentaciones con frases de la Biblia.

No se puede vivir la Cuaresma sin oración y sin Biblia. No hay que engañarse. Porque la Oración y la Biblia afianzan la fe, la unión con Cristo; y hacen posible el avanzar por el difícil camino de la conversión, en el que prima la voluntad de Dios. 

¿Y las cenizas? ¿Por qué comenzamos la Cuaresma con la imposición de cenizas en la frente? Primero hay que recordar que la ceniza es solo un signo. Tranquilamente podemos comenzar la Cuaresma sin cenizas. Aunque nos hace bien comenzar en comunidad un tiempo tan importante. Y en comunidad participar de la bendición de la ceniza y de su imposición.

En el Antiguo Testamento la ceniza es símbolo de arrepentimiento de los pecados; y expresión del deseo de hacer la voluntad Dios, Creador y Salvador. La ceniza está unida a la búsqueda de conversión. También es un recordatorio de nuestra condición mortal: "Recuerda que eres polvo y que en polvo te convertirás", dice una de las fórmulas de imposición. 

Somos de Dios, venimos de Dios, y hacia Dios vamos. Somos peregrinos que van a la casa del Padre. Y para llegar debemos encaminar nuestra vida según Dios, según la Palabra de Dios. Porque podríamos estar caminando un camino de perdición. ¿Hacia dónde estoy encaminando mi existencia? La Cuaresma -con la ayuda de la ceniza- es tiempo para pensarlo; y para reencaminarnos hacia el Señor. 

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